ESTACIÓN SEUL (Reseña)

Una noche cualquiera en Seúl. Una chica rompe con su novio y huye hasta la estación subterránea, este lugar es el refugio nocturno de la gente que vive en la calle, cuando ella llega allí se encuentra con que este grupo de desventajados se han convertido en una horda zombie. Cuando el apocalipsis se desata, el padre y novio (o exnovio) de la chica van en su búsqueda. 
Puntuación: 4,5 de 5 puntos.

Si vio "TREN A BUSAN", sabrá a qué atenerse con "ESTACIÓN SEUL", en la cual se inspira, no como un remake live ni como un spin off, sino como una secuela cuando la acción sale de la estación y se traslada a los claustrofóbicos vagones del tren eléctrico.
Soy amante de las animaciones de Sang-hoo, y con esta se lleva los aplausos cuando adopta el boom zombie y lo convierte en una opera cruda, salvaje y por qué no, pervertida. Nos encontramos con los variopintos personajes que surgen en la jungla sangrienta en la que se convierte cada escenario con el predominio Z, pero en un modo más sombrío y cínico, bien logrado por las libertades que regala la animación.
"ESTACIÓN A SEUL" posee un argumento no solo cruel, sino desesperanzado, realista frente a lo que depara la decadencia social, y no por los zombies, que finalmente hacen lo que todo zombie debe hacer; sino por la tendencia humana a sacar lo peor de sí en tiempos de mayor conflicto.
Por cierto, yo por qué sigo escribiendo "zombies, zombies, zombies", si en la crítica a "TREN A BUSAN", expresé claramente que no son del tipo Z, sino que estas son hordas de infectados. ¡PLOP!