PET (Reseña)

Y si eres un simple empleado de un refugio de animales, con una vida monótona y quizá mediocre, pero también, llevas contigo una extrema obsesión por una chica que trabaja como mesera y que poco te presta atención. Entonces, un día decides secuestrar a la chica y encerrarla en una de las jaulas del refugio. Parece que has logrado tu sueño, has dominado al "amor de tu vida", pero todo se viene abajo cuando ella deja escapar su verdadera personalidad y nada será igual.

Calificación: 4 de 5 puntos

Puede parecer que fui muy benévolo con la calificación, pero realmente la película me encantó desde el punto en que prefiero estos thrillers que cualquier otro fenómeno sobrenatural o extraterres, sobre todo cuando son capaces de llevarme a experimentar la angustia de creer que esto puede ocurrir en la vida real, y para confirmarlo cualquiera se puede remitir a GOOGLE y teclear términos que lleven a creepys y peor aún a casos reales que pueden superar lo que se representa en esta película.
Si, "PET" deja en evidencia algunos trazos propios de las clase B, pero no le resta la calidad de un thriller que va llevando a la asfixia emocional al desatarse un "juego" de dominación entre la supuesta victima y su captor. Es una producción que enmarca el suspenso claustrofóbico de esa subcategoría del género cuyas tramas se desarrollan en espacios cerrados y con un mínimo de personajes que cargan con la responsabilidad de la acción. Puede parecer otra película más de suspenso, pero desde su inicio se evidencia que hay mucho más que la historia de un secuestro por parte de un loco obsesivo.
Correcta, tensionante, una montaña rusa que propone un respiro de los clichés.
Por cierto, Dominic Monaghan se reconcilia con el cine con el personaje de Seth, y Holly, personificada por Ksenia Solo fue simplemente fabulosa.

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